La importancia de una correcta dosificación y aplicación del nitrificante a jamones y paletas es imprescindible para lograr un producto de calidad constante. Esta operación, realizada tradicionalmente de forma manual, implica una gran pérdida de tiempo y trabajo. El diseño de nuestro sistema en continuo permite una dosificación exacta del nitrificante, así como realizar un frotado por igual a cada pieza, asegurando que todas ellas reciban un tratamiento idéntico, consiguiendo una uniformidad en todo el lote y minimizando el tiempo y mano de obra empleada en esta fase.

Una vez colocado el jamón en la banda transportadora, una fotocélula lo detecta y el dosificador incorpora sobre la pieza la cantidad de nitrificante necesario mientras entra en el bombo. Una vez dentro, gracias al diseño de las palas y al movimiento giratorio del bombo, se hacen rotar los jamones suavemente sobre sí mismos, frotándose contra la pared interna y evitando los golpes entre ellos mientras se reparte uniformemente el nitrificante por toda su superficie.